Las Muy Ricas Horas del duque Jean de Berry

f. 4v, Abril


Volver

En este mes de primavera, la naturaleza se renueva. La escena tiene lugar en el Castillo de Dourdan, posesión del Duque, cuyas ruinas aún hoy se yerguen sobre una colina.

Un bucólico burgo, junto al rio Orga, donde navegan dos barcas, rodean a la fortaleza. Sobre el fondo verde de praderas y bosques se agrupa un núcleo de personas con vestidos brillantes. Una pareja de novios intercambia sus anillos bajo la mirada de los padres, y unos jóvenes recogen flores. Compositivamente todo el dibujo es un prodigio de diseño y armonía. En la pirámide que forman las figuras humanas, los colores de los trajes se destacan entre sí por contraste. El encanto de la nueva estación concuerda íntimamente con el balance de colores que se evoca en toda la imagen.

También las expresiones de algunos personajes están traducidas delicadamente, y se expresan con igual maestría la ternura, pudor, afecto, etc. Multitud de hipótesis podrían aparecer alrededor de esta escena, de apariencia tan real. Es muy posible que se refiera al encuentro de dos ilustres prometidos, la nieta del Duque de Berry, Bonne, que contaba en 1410 sólo once años de edad, y Carlos de Orleáns, de dieciséis. El acuerdo para este enlace tuvo lugar en Gien y los esponsales se celebraron en Riom cuatro meses más tarde. El castillo de Dourdan estaba a la disposición del que iba a convertirse en nieto del Duque; así, es de suponer que el encuentro físico de los prometidos tuviera lugar allí. Esta deliciosa miniatura recoge, con un innegable sentido lírico, el espíritu festivo de una jornada familiar.


f. 4v, Abril

Volver

f. 4v, Abril

En este mes de primavera, la naturaleza se renueva. La escena tiene lugar en el Castillo de Dourdan, posesión del Duque, cuyas ruinas aún hoy se yerguen sobre una colina.

Un bucólico burgo, junto al rio Orga, donde navegan dos barcas, rodean a la fortaleza. Sobre el fondo verde de praderas y bosques se agrupa un núcleo de personas con vestidos brillantes. Una pareja de novios intercambia sus anillos bajo la mirada de los padres, y unos jóvenes recogen flores. Compositivamente todo el dibujo es un prodigio de diseño y armonía. En la pirámide que forman las figuras humanas, los colores de los trajes se destacan entre sí por contraste. El encanto de la nueva estación concuerda íntimamente con el balance de colores que se evoca en toda la imagen.

También las expresiones de algunos personajes están traducidas delicadamente, y se expresan con igual maestría la ternura, pudor, afecto, etc. Multitud de hipótesis podrían aparecer alrededor de esta escena, de apariencia tan real. Es muy posible que se refiera al encuentro de dos ilustres prometidos, la nieta del Duque de Berry, Bonne, que contaba en 1410 sólo once años de edad, y Carlos de Orleáns, de dieciséis. El acuerdo para este enlace tuvo lugar en Gien y los esponsales se celebraron en Riom cuatro meses más tarde. El castillo de Dourdan estaba a la disposición del que iba a convertirse en nieto del Duque; así, es de suponer que el encuentro físico de los prometidos tuviera lugar allí. Esta deliciosa miniatura recoge, con un innegable sentido lírico, el espíritu festivo de una jornada familiar.


Preferencias sobre cookies

Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios mediante el análisis de sus hábitos de navegación. Para más obtener más información puedes leer nuestra política sobre cookies. Puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón Aceptar o configurarlas o rechazar su uso haciendo click AQUÍ.