El esquema compositivo de la imagen sigue la fórmula común de los mensajes a las iglesias: el ángel que da el libro a san Juan, a la izquierda, y la iglesia a la derecha. Sin embargo, en esta imagen el miniaturista ha identificado mediante inscripciones tanto a los personajes como a la iglesia.
La entrada de la iglesia está formada por dos grandes arcos de herradura amarillos. Sobre el dintel rojo, se sitúa otro arco más pequeño, en cuyo trasdós se dibujan tres almenas decorativas.
En esta miniatura, así como en la anterior, el artista ha prestado especial atención al color violáceo del fondo, que contrasta con el amarillo, el rojo y las tonalidades más oscuras, como el azul o el verde.
La imagen del águila, el animal que se asocia a san Juan, representa la letra a que inicia el texto. El ave, nimbada, apoya las patas sobre un cojín y despliega una de sus alas mientras mantiene la otra plegada. Mantiene la cabeza girada hacia las columnas de texto, como si nos invitara a leerlo. El artista ha puesto especial empeño en el minucioso dibujo del plumeado.
Ángela Franco Mata
Jefa del Departamento de Antigüedades Medievales del Museo Arqueológico Nacional
(Fragmento del libro de estudio Beato de Silos)