«Tú, Falso Semblante, serás de los míos
de aquí en adelante, con la condición
de que ayudarás a nuestros amigos;
jamás en su contra deberás obrar
sino que, al contrario, habrás de ayudarlos;
y en este combate contra el enemigo
tendrás que emplearte con todas tus fuerzas».
Roman de la Rose, versos 10931-10937
(Ed. y trad. de Juan Victorio)
«Tú, Falso Semblante, serás de los míos
de aquí en adelante, con la condición
de que ayudarás a nuestros amigos;
jamás en su contra deberás obrar
sino que, al contrario, habrás de ayudarlos;
y en este combate contra el enemigo
tendrás que emplearte con todas tus fuerzas».
Roman de la Rose, versos 10931-10937
(Ed. y trad. de Juan Victorio)
