Como es habitual en las representaciones de Escorpio, hay dos escorpiones en la ilustración, a pesar de que el nombre del signo es singular; la causa probablemente reside en la influencia de las imágenes astronómicas de la constelación. El brazo extendido de Marte sujeta por la cola a uno de los escorpiones, mientras que el otro flota en el cielo, delante de su planeta regente. En este caso Marte está vestido para el combate: lleva sobre el caftán una cota de malla que le protege el cuello y los hombros, defensas de metal en los antebrazos y un yelmo que cubre también las orejas y los lados del cuello. En la mano derecha blande una espada larga y ligeramente curva, cuya vaina le cuelga del cinto.
Los dueños de los tres decanatos son Marte nuevamente, aquí mucho más joven, imberbe y sosteniendo una maza, el Sol, y Venus tocando un pandero.
Stefano Carboni
The Metropolitan Museum of Art
Conservador adjunto del Dpto. de Arte islámico
(Fragmento del volumen de estudio del Libro de la Felicidad)